CAPÍTULO 3. VIDAS TEJIDAS: ALVARO DIEGO GÓMEZ CAMPUZANO

3.3. ALVARO DIEGO GÓMEZ CAMPUZANO

Figura 56. Alvaro Diego en su taller.

Nace en Bogotá, en 1956. Vive actualmente en Bogotá, Colombia.

Se forma como arquitecto-paisajista en la Universidad Javeriana de Bogotá. Se especializa en escultura en metal y fundición en la técnica de la cera perdida, técnicas con las que ha logrado dar rienda suelta a su capacidad creativa. Como escultor, ha producido obras que podemos contemplar en espacios públicos. Sus obras distribuidas por todo el mundo, hacen parte de colecciones en diversos espacios como: Museo de Arte Moderno de Bogotá y Cartagena, Museo de Arte Contemporáneo de Cartagena; especializados en textil: Museo Central de Textiles de Lödz-Polonia, Centro de Documentación y Museo Textil de Terrassa-España, Museo de la Papicería Contemporánea de Angers-Francia, entre otros.

Su ingreso al arte textil se da en 1984, durante el Salón Atenas realizado en el Museo de Arte Moderno de Bogotá, allí presentó Reflejos, una instalación arquitectónica elaborada en material blando, compuesta por paneles giratorios y cometas.

Alvaro Diego nos aporta su definición personal y concepto del arte textil:

El tejido  hace parte del arte textil, es un concepto  universal que nos construye como seres humanos, desde nuestro cuerpo hasta nuestras ideas.  A su vez se relaciona con el cosmos,  es una red que se representa  a partir del  cruce de ejes que crean un punto  de unión y entrelazan estructuras y conceptos. Se puede dar  en  tejidos orgánicos, estelares, naturales, sintéticos, orgánicos, metálicos, digitales, entre otros. (ver Anexo 2.3)

Figura 57. Primeros textiles.

La propuesta persona del artista surge de una inquietud constante en torno al tema de las civilizaciones antiguas y su contraste con la urbe contemporánea; también del sistema de códigos universales: prehispánicos como los quipus incas o el binario de los mayas; de las antiguas civilizaciones como los jeroglíficos egipcios, como los signos arameos, entre otros, o por sistemas más modernos como el de las tarjetas perforadas de computador.

Las obras de Alvaro Diego son una armónica unión entre lo ancestral y lo contemporáneo “parto de la investigación de numerologías, arquitecturas, espacios ceremoniales y geometrías precolombinas”. Para realizarlas hace uso de una amplia gama de materiales, que se da por su continua exploración e investigación, estos van desde fibras naturales, pasando por las sintéticas, materiales metálicos como las bandas transportadoras industriales, hasta lo orgánico —la clorofila y el moho—.

Por lo general, las obras nacen de una idea preconcebida y de un dibujo o boceto previo, como él lo expresa para sus tejidos metálicos  “todo es construido, calculado, programado, cortado; no hay mucho margen para la improvisación,  implica mucha precisión”. (ver anexo 2.3.)

La idea inicial va evolucionando y se transforma durante su realización; las obras pueden tener etapas que le dan pie para seguir investigando. Este es uno de esos casos (Figura 58):

En Mutantes, que corresponde a una de las primeras piezas, tiene un acercamiento a lo textil, está desarrollada con técnicas de compresión, torsión y tensión, dándoles un acercamiento a lo arquitectónico, la fibra se tornó  muy rígida, y lo que yo buscaba era encontrar  los  opuestos y contrarios, esta obra me sugirió el metal  y mi intención es que este material cogiera un carácter flexible como el textil, opté entonces por las bandas transportadoras industriales. (ver Anexo 2.3.)

Figura 58. Nudos en tierra (arriba) y mutante (abajo).

Como vemos, esas aproximaciones a las fibras textiles lo llevan a explorar con el metal, con las bandas transportadoras y posteriormente con las argollas-cadenas de hierro cromado, con estos materiales es que Alvaro Diego irrumpe en la escena internacional del textil contemporáneo, rompiendo paradigmas en cuanto a lo que se acostumbraba ver en una obra de tipo textil.

Las primeras obras con tejido metálico son las desarrolladas con bandas transportadoras industriales, como la serie de Bastones ceremoniales, Collares, Pectorales y Quipus, entre otras (Figuras 59 y 60).

Un detalle que vale la pena mencionar es el tipo de acabado —por decirlo de alguna forma— de estas piezas, ya que la acción de los óxidos es un sello personal del artista. Con los procesos de oxidación, la pieza se torna completamente diferente, se puede ver de color amarillo ocre, o negra o plateada, como se puede ver en el comparativo de la figura 60, donde un quipu aparentemente igual en estructura se puede convertir en tres o más piezas diferentes.

           

       Figura 59. Bastones ceremoniales en bandas transportadoras.  

Figura 60. Quipus en bandas transportadoras.

           

Otra de sus exploraciones en el textil es la de las cadenas de hierro cromado, que le representan una dispendiosa y ardua labor, por cuanto las cadenas se forman con pequeñas argollas que se entrelazan manualmente una a una. Dependiendo del tamaño de las obras va el número de personas —mínimo cinco— que se requieren para tejerla y el tiempo de elaboración, si es pequeña pueden ser tres meses y si es grande se va de uno o dos años de trabajo. Con este material ha creado piezas escultóricas y tipo tapiz (Figuras 61 y 62).

(…) los tejidos que he estado construyendo actualmente: son todas estas mallas que tienen la reminiscencia del Medioevo, de las cotas de malla, los tejidos de dragón, los tejidos de sapo, como los que eran utilizados en las armaduras. En las primeras instalaciones empecé a construir estos tejidos mentalmente, pero hasta hace tres años los hice. (ver Anexo 2.2.)

La obra de Alvaro Diego es muy valorada en escenarios internacionales, en donde sus tejidos metálicos, irrumpieron para quedarse en los circuitos del arte contemporáneo, todo ello gracias a  su tesón y constancia. Hay muchas obras en su taller que ansían ser apreciadas por el público, pero que lastimosamente no podrán ser vistas en esos escenarios y es debido a su volumen y peso, pues al estar constituidas por metal generan un altísimo costo para los traslados, que por lo general corren por cuenta del mismo artista.

Si bien fuera del país su nombre se ha posicionado, lastimosamente en Colombia es muy poco el conocimiento que se tiene de su obra textil, pero afortunadamente las escultóricas si y se les pueden apreciar en diversos espacios públicos.

El alto nivel artístico de sus obras también le ha dado el reconocimiento como jurado en el mayor certamen de arte textil: la Trienal Internacional de Tapicería en Lödz-Polonia, a donde solo llegan los mejores del mundo.

Figura 61. Obras en hierro cromado: quipus, sin fin y espirales.

Y así Alvaro Diego continúa su tránsito por la senda del textil contemporáneo, creando extraordinarias obras que siempre nos provocan asombro y con las que ratifica que los límites en la creación no existen.

Figura 62. Tejidos metálicos.

Para conocer más de la obra del artista se puede visitar: http://www.alvarogomezcampuzano.com/   y se le puede contactar en el e-mail: arteadgc@yahoo.com

LISTA DE FIGURAS

Figura 56. Alvaro Diego en su taller. Fotografía: Martha Alvarez.

Figura 57. Primeros textiles. Fotografía: Martha Alvarez.

Figura 58. Nudos en tierra (arriba) y mutante (abajo). Fotografía: Martha Alvarez.

Figura 59. Bastones ceremoniales en  bandas transportadoras.  Fotografía: Martha Alvarez.              

Figura 60. Quipus en bandas  transportadoras. Fotografía: Martha Alvarez.

Figura 61. Obras en hierro cromado: quipus, sin fin y espirales. Fotografía: Martha Alvarez.

Figura 62. Tejidos metálicos. Fotografía: Martha Alvarez.